Una vez allí se reencontró con todos sus compañeros, entre
ellos, el mope de la Pitonisa; Yelidá que al igual que Karen Yapoort toma sus pastillitas anti loquera, aparentemente en el día de hoy olvidó tomarla y llegó con los cables cruzados, “Maldiciendo” a la Pitonisa, porque este Mope habría dicho que ella andaba con un yeso fruto de la tanta de golpes que le dieron en New York.
Yelidá aclaró a la Pitonisa que ella es transparente y no oculta nada, pero mucho menos permite que desinformen y hablen disparates cuando su nombre está de por medio.
La verdad es que Yelidá nunca tuvo un yeso puesto, aunque en el único lugar que no le dejaron moretones fue en los dientes; es por ello que le cambiaron el nombre y en lugar de “La Dinastía del Dinero” ahora le llaman “La Dinastía de los Golpes”.